La belleza del petit point, esos trabajos entrañables, aquellos en los que se recreaban nuestras abuelas, vuelven con los encantos de la artesanía.
El petit point, es reconocido por algunos como una de actividad doméstica enraizada en la familia.
Un punto que nos revela todo el glamour de los objetos materiales que nos rodean, de los paisajes que contemplamos, esas son las fuentes de inspiración que de nuevo y, como de una resurrección se tratase, aparecen en determinados objetos de culto por el arte, entre los que no podían faltar los bolsos de moda.
Vuelve aquello que es sensible para nuestros sentidos, especialmente para la vista. La belleza del petit point se reinventa y combina los nuevos materiales con ese laborioso tejido bordado que nos sensibiliza hacia formas de hacer que estaban casi olvidadas.
El petit point se vuelve a poner de moda. Las viejas labores caseras en manos de mujeres hacendosas, nos arrojan nuevas luces para volver a introducirnos en el bucle de arte – belleza -tradición.
Celebridades de la gran pantalla llevan sus bolsos hechos con puntos de petit point a los que se les ha añadido una serie de complementos que dan un valor añadido, brillantes o piedras semipreciosas alardean para asentar ese arte sacado del baúl de los recuerdos.
Petit point o punto de cruz
Si el tejido hecho en petit point relaja a quien lo realiza, es incuestionable que aporta algunos valores como la autoestima en quien los porta.
El petit point consiste en puntos dibujados en diagonal muy pequeños para que ese dibujo final quede tupido. Algunos lo confunden con el punto de cruz, sin embargo las diferencias son notables.
El punto de cruz es una forma popular de bordado en la que se usan puntadas que quedan en forma de equis, suele ser un poco lento de terminar ya que cada punto se borda «2 veces», una vez para formar una linea de la X y otra para realizar la otra línea de la X.
Una joya en el museo
Entre los muchos bolsos que conforman la colección museográfica del Museo del Bolso, destaca un elegante complemento hecho en punto petit point con bastidor dorado y labrado.
El bolso con el que se abre esta noticia incrusta pequeñas piedras aguamarinas.
El cierre de pestaña a presión lleva un engarce con tres piedras malvas.
Forrado en seda color amarillo lleva dos bolsillos interiores y está datado en 1941, una época en la que Europa y el mundo estaba inmerso en una sangrienta Guerra Mundial.
Ante la barbarie, la masacre y la devastación, el bolso representa el arte, la cultura y pone un contrapunto valores sublimes de la inteligencia humana.